Este 20 de noviembre seguramente estaremos todos pegados a la pantalla de la televisión viendo el inicio del Mundial de Qatar. Sin embargo, aunque veamos todos los partidos y conozcamos las reglas del juego, eso difícilmente nos convertirá en excelentes jugadores. Lo mismo pasa cuando queremos aprender un idioma: ser un espectador no nos hará expertos. Como en el fútbol, para aprender inglés debemos tener en cuenta dos factores muy importantes: las reglas y la práctica (sobre todo la práctica).

Así como en el fútbol hay ciertas reglas que deben seguirse para asegurar la continuidad del partido, lo mismo pasa con las reglas de un idioma nuevo. Puedes pensar en la gramática y la ortografía como las reglas del juego. Por ejemplo, piensa en el offside. Estos serían algunos errores leves que complican la fluidez de la comunicación y puede que tengas que volver a empezar, pero algunas veces pasan desapercibidos. I didn’t do nothing!

También hay tarjetas amarillas. Con estas faltas, probablemente recibirás un llamado de atención de tu interlocutor, pero la conversación podrá continuar mientras tengas cuidado de no volver a cometer ese tipo de error. She don’t go to the meeting yesterday. 

Otro ejemplo son las tarjetas rojas. Con este tipo de faltas, la comunicación simplemente no puede continuar. Imagina decir algo que no tenga coherencia ni sentido en una conversación de negocios. Puedes estar seguro de que no obtendrás ese negocio. I is understand for the cotization and I am agree.

Por otro lado, así como hay personas que parecen tener un talento nato para el fútbol y otros que se dedican a practicar mucho para ser expertos, con el inglés pasa lo mismo. Ya sea que seas un Messi y el idioma parezca salirte sin mayor esfuerzo o un Cristiano Ronaldo y te pases horas practicando, de igual forma podrás llegar a ser un experto en el idioma. Eso sí, ni Messi ni Ronaldo llegaron a jugar como juegan hoy solo viendo fútbol en la televisión, así que no esperes ser bueno en el inglés si no lo practicas y le dedicas el tiempo necesario. Escucha, practica, conversa, escribe…

Y por supuesto, recuerda que aprender bajo la guía de un entrenador facilita mucho el proceso. Entonces no olvides que puedes contactar a Conversa para que te acompañemos y te guiemos en el proceso de aprendizaje de inglés (para aprender a jugar fútbol necesitarás una academia diferente).